La leyenda de la chica de la curva

La leyenda de la chica de la curva
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Ya hace un par de años que nos enteramos de que la chica de la curva no se sube al coche de Ernest Riveras por si acaso. En su momento se hizo bastante famosa la mala pata del encargado de poner la voz en las retransmisiones del Mundial de MotoGP en TVE. Pero realmente ¿quién es la chica de la curva?

Atendiendo a lo que nos cuentan por la red la chica de la curva es un alma en pena que vaga por la carretera en la que sufrió un accidente mortal. En su vagar se presenta como una autoestopista que cuando se sube contigo te avisa de una curva peligrosa que se acerca, precisamente aquella en la que ella murió. En el momento en el que llegas a esa curva, suele desaparecer incluso con el vehículo en marcha. ¿A vosotros nunca os han contado historias de este tipo? ¿Nunca habéis tenido la curiosidad de saber de dónde vienen estas leyendas?

Esta en concreto, que parece tan estrechamente relacionada con el mundo actual parece que es de las más antiguas que existen. Hay incluso quién se atreve a decir que ya aparece en la Biblia, de la que no se publicó precisamente ayer la primera edición. Tan famosa parece la historia que hata el grupo Ilegales le dedicó una canción titulada el fantasma de la autopista.

¿Nunca has pensado mientras circulabas por aquella carretera perdida de la mano de dios que te podrías encontrar a alguien así en la próxima curva? ¿A vosotros no os inquietaban las historias que se contaban por la noche en los fuegos de campamento? Menos mal que este tipo de leyendas nunca pasan en primera persona, porque siempre es el amigo de un amigo al que le ocurrió y aquel amigo se salvó por los pelos para poder contarlo a todos.

Claro que si la leyenda original viene de tiempos de la Biblia lo que parece normal es que no haya nadie para contárnosla en primera persona. Aunque hay que reconocer que desde aquella época, las carreteras han evolucionado un poco (bueno, algunas no mucho) pero los medios de transporte si, porque desde las caballerías de entonces hemos evolucionado hasta las caballerías de ahora, que cambian el músculo animal por el músculo de vapor.

Así que ten cuidado cuando salgas por esa carretera de curvas que tanto te gusta, pero no para recoger a la chica de la curva, sino para no salirte de la carretera por ir haciendo el fitipaldi.

Vídeo vía Youtube | jorgeilegal Foto vía Flickr | Klearchos Kapoutsis

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