Va a hacer casi ya un año que aparecieron las primeras fotos espía de la versión rutera de la KTM 1290 Super Duke R, y ya, con el modelo casi a punto para el EICMA, la gente de Austria ha hecho público su nuevo modelo: la KTM 1290 Super Duke GT. Una moto que llega para ser un escalón intermedio entre la deportividad de la Super Duke R y las aptitudes viajeras de las Super Adventure.
Algunos medios como MCN hasta han podio probar las unidades pre-serie, pero nosotros de momento nos tenremos con informaros de los datos que hemos podido recoger. Lo que está claro es que en KTM no se quieren quedar fuera de ese segmento a medio camino entre las trail asfálticas y las motos de turismo de altos vuelos como la nueva BMW S 1000 XR, además de seguir completando su catálogo.
KTM 1290 Super Duke GT: más equipamiento, más kilómetros
Basicamente, la nueva KTM Super Duke GT es una Super Duke R a la que se le han adaptado algunos elementos para cambiar su faceta deportiva por una menos radical, pero sin llegar a peder agresividad ni coqueteando con las aptitudes fuera del asfalto.
La KTM 1290 Super Duke GT recibe un buen puñado de equipamiento para mejorar su radio de acción
Las suspensiones WP semi-activas controladas electrónicamente reciben un tarado específico, la carrocería es más envolvente que en la naked y la ergonomía se ha revisado para un mejor confort. Se ha dotado de otros elementos como el sistema de alumbrado inteligente en curva, una pantalla regulable en ocho posiciones, un depósito de mayor capacidad, alzas en el manillar, un mapeado con cuatro modos de conducción, control de crucero, soportes para maletas que posiblemente queden ocultos en un subchasis que parece rediseñado o puños calefactables.
Además de todo esto también equipará la tecnología que ya conocemos de modelos anteriores como el control de tracción, ABS Bosch de última generación sensible a la inclinación, acelerador electrónico...
Según cuenta Andy Downes en MCN el motor también recibiría cambios a nivel interno como unas culatas rediseñadas para entregar la potencia de una forma más suave o un sistema de escape también modificado que incluye una válvula para reducir el ruido.
La electrónica se encargaría también de ofrecer una entrega de potencia más turística enfatizando su enfoque rutero y de paso reduciendo un poco el consumo del motor LC8. Por lo demás la planta motriz bicilíndrica de 1.301 centímetros cúbicos es la misma que la ya conocida de la Super Duke R. La potencia máxima posiblemente no se vea alterada, o si se reduce sería en una variación mínima en beneficio de una mejor, aún, curva de par.
Nos mantendremos a la espera del comunicado oficial de la marca naranja, a ver qué más cosas podemos concretar. Aunque posiblemente nos toque esperar, una vez más, hasta su presumible presentación en el EICMA de Milán.
Vía | Asphalt and Rubber, MCN